Reflexión no.15: Mi paso por la Historia de la Arquitectura
17.12.2020 por Daniela C. Ramos Carmenatty
Por fin ha llegado el final del semestre. Nuevamente nos hemos tenido que enfrentar a tantos retos y situaciones complicadas que marcarán mi vida estudiantil para siempre. Así que tomaremos un descanso para mirar hacia atrás y poder analizar mi participación en esta clase. En esta autocrítica trataré de no ser tan severa. No porque sienta lástima de mí misma, sino que me tengo que dar el crédito ante tantas situaciones adversas que he logrado vencer. Estas van desde la falta de internet hasta apagones constantes. Sin embargo, tengo que indicar que he logrado mi meta, he podido leer, analizar y, hasta, utilizar lo aprendido en clase en algunos proyectos de arquitectura.
Son esas lecturas las que me han permitido conocer un poco más sobre los diferentes arquitectos que le han dado vida a esta especialidad. Wright y Schindler, entre muchos que he conocido. También he conocido sus obras, su forma de diseñar, su forma de pensar y de plasmar los conceptos que vuelan en sus mentes y que son desarrollados en obras icónicos que dejan huellas en el mundo. Esas estructuras que fomentan la funcionabilidad del edificio pero que, también, muestran la belleza enmarcada en éste. Tampoco podemos pasar por alto la historia de una edificación y la forma en que se construye entre, alrededor o al lado creando una combinación entre lo antiguo y lo moderno.
Son esos arquitectos y la historia que se nos enseña a través de este curso que nos permiten admirar la belleza y la complejidad de la disciplina. Es aquí donde conocemos las grandes obras arquitectónicas mientras, de la mano, conocemos la vida, pensamiento y creatividad de arquitectos famosos en todo el mundo. Arquitectos que han dado parte de su creatividad para el disfrute de la humanidad. Una humanidad que, en muchas ocasiones, se olvida de las semillas creadoras que formaron la misma. Nada de esto se sabría si no tuviésemos cursos de teoría que permiten encapsular la historia de estos Maestros de la arquitectura para nuestro propio enriquecimiento intelectual y humano.
Y es esa historia la que me permite aprender lo que es el muro cortina, su funcionabilidad, su creador y, por supuesto, su uso. Es a través de ese aprendizaje que me permite utilizar esos conceptos en mis diseños de arquitectura. O por lo menos lo intento ya que entiendo que es la continua práctica la que ayudará a alcanzar la perfección de esos Maestros. Como también me ayuda a utilizar el concepto de patio como idea tipológica en mis proyectos. Entendiendo como esa obra le imprime una nueva dimensión, belleza y vida al edificio pensado.